América Latina y un enemigo común: el imperialismo
Por: Victoria Sosa
Estados Unidos, de distintas maneras, busca infiltrar su agenda en la de los países de América Latina. Europa ve con malos ojos las últimas resoluciones contra la elección guatemalteca. Venezuela y Guyana en tensión por el Esequibo.
Los acontecimientos de las últimas semanas en nuestra Patria Grande nos permiten ver una serie de eventos que reflejan luchas populares, resistencia contra el imperialismo y defensa de la soberanía nacional.
En Guatemala, por ejemplo, la misión de la Unión Europea (UE) que está en el país aseguró que la Fiscalía General amenaza la transición del poder en el país, después de los allanamientos al tribunal electoral y la suspensión de la personería del partido del presidente electo, el progresista Bernardo Arévalo.
El jefe de la Misión de Observación Electoral de la UE, Jordi Cañas, indicó que los operativos, sumados a la suspensión del partido Semilla, son «acciones que atentan contra los derechos políticos de los votantes y candidatos, la integridad de las elecciones, el respeto a sus resultados y amenazan la transición pacífica del poder al presidente electo de Guatemala».
La Fiscalía General amenaza la transición del poder en Guatemala. Sin embargo, Arévalo y el pueblo guatemalteco no van a permitir que le arrebaten la elección genuinamente ganada.
Para el Presidente electo, cuyo triunfo pone fin a más de una década de gobiernos de derecha, las acciones de la Fiscalía son parte de un «golpe de Estado en curso» para evitar que tome posesión, el 14 de enero, al haber prometido atacar a la corrupción.
República Dominicana, una colonia yankee en pie de lucha
Los pueblos latinoamericanos defienden la voluntad popular, pero son ellos mismos quienes se enfrentan al poder cuando este no da respuestas a sus problemáticas, o peor aún, cuando las exacerba. Es por ello que hemos sido testigos de una huelga total en el norte de República Dominicana. El objetivo fue exigirle al Gobierno que atienda los reclamos en cuanto a mejorar los servicios médicos, la construcción de escuelas y la terminación de obras públicas. A su vez, luchan por la rebaja del precio de la canasta básica y los combustibles, así como la mejora del servicio eléctrico del país.
Estos reclamos no son solo contra los gobiernos locales. También tenemos historia y experiencia en enfrentar a las grandes corporaciones que pretenden llevarse lo que es nuestro, dejando solamente miseria en nuestras tierras. Estas corporaciones no actúan solas, tienen cómplices dentro de nuestro territorio que no son más que traidores a la Patria.
Venezuela y Guyana en la cuerda floja
En Venezuela, el gobierno rechazó el inicio de actividades de ExxonMobil en aguas del territorio en disputa del Esequibo. Además, el embajador venezolano en la ONU rechazó el accionar de Guyana que intenta frenar el referendo constitucional que Venezuela llevará a cabo el 3 de diciembre para definir su política de soberanía.
El canciller, Yvan Gil, publicó en su cuenta de X el comunicado que señala que esto es «una nueva provocación por parte de un Gobierno al servicio de ExxonMobil».
Pese a los intentos de Guyana de socavar las elecciones democráticas venezolanas por el Esequibo, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela amparó dicho proceso. Así, continúa la campaña Venezuela Toda, enfocada en aumentar la participación soberana del pueblo venezolano.
Una encuesta realizada por International Consulting Services mostró que dos tercios de la población venezolana votaría en las próximas elecciones por el “Gran Polo Patriótico Simón Bolívar» liderado por el mandatario Nicolás Maduro. Asimismo, casi 60% de la población acordó que deben estar unidos en la lucha por el Esequibo. Con respecto a la Guayana Esequiba, el 57,9% estimó que independientemente de las posiciones políticas, los venezolanos deben luchar por el Esequibo.
En la misma línea, el 54,8% consideró que las trasnacionales petroleras y Estados Unidos “están detrás de la intención de quitarnos el Esequibo a los venezolanos”.
Con este acontecimiento podemos ver la resistencia venezolana ante las provocaciones de Guyana y ExxonMobil, del mismo modo en que resalta la firmeza del gobierno y la ciudadanía en defender su soberanía.
No obstante, no debemos ser crédulos en creer que los favorecedores de intereses foráneos no son capaces de planificar un contraataque. De hecho, en Panamá asesinaron a Jorge Luis Franco, candidato a vicealcalde de La Chorrera por el partido Realizando Metas, la noche del martes 14 en la puerta de su casa.
Este delito se consumó en medio de un clima de conflicto por las permanentes protestas contra las corporaciones mineras internacionales, de modo tal que se ha visto agudizada la violencia contra candidatos de partidos opositores al extraccionismo. En este sentido, el crimen cometido contra Franco fue un claro ataque de esos grupos económicos que necesitan seguir saqueando indiscriminadamente nuestros recursos.
No es un caso aislado en este país, pues es el segundo político abatido a tiros. A comienzos de noviembre acabaron con la vida de Cesar Caballero, representante de Porras y presidente del Consejo Municipal de San Miguelito, también frente a la puerta de su casa. Esto deja ver que es un modus operandi en específico, utilizado para agudizar la violencia con la que operan y actúan estos grupos, elevando los grados de terror.
En conjunto, estos eventos resaltan la necesidad de una atención a las luchas y resistencias en América Latina contra fuerzas externas y sectores conservadores. La defensa de la soberanía y los derechos populares sigue siendo un tema crucial en la región.
Es esencial brindar apoyo a los movimientos que buscan un cambio democrático y equitativo. La comunidad internacional y regional debe estar alerta ante posibles contraataques por parte de aquellos que buscan socavar la autodeterminación de estos países. Organizarse es un mandato.
1 comentario