El nuevo Cóndor y sus métodos de sumisión “new age”

Ésta marcada sumisión económica está estrictamente complementada con los lazos entre el imperio norteamericano y los cárteles que distribuyen drogas y violencia entre nuestros pueblos.  

Un ejemplo lo vemos en la reciente detención de Jonathan Alexis Weinberg Pinto, quien estaría vinculado con Genaro García Luna (ex secretario de Seguridad Pública del gobierno mexicano) por delitos de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita y peculado (apropiación de fondos públicos) durante el gobierno de Felipe Calderón. 

Ya en febrero, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda, presentó pruebas contra García Luna y la familia de los Weinberg.  “Una de las características de esta trama es que el dinero se lo llevaban a Estados Unidos a través de países del Caribe, principalmente Barbados, rumbo a Miami en Florida”, según explicó entonces el titular de la UIF, Pablo Gómez. 

Genaro García Luna actualmente se encuentra detenido en Estados Unidos tras ser declarado culpable por el Tribunal Federal de Distrito de Brooklyn, acusado de recibir millones de dólares del Cártel de Sinaloa.

Pero esto no es todo, en un acto de dudosa astucia para poder declarar la inocencia de García Luna, la defensa del mismo a cargo del Dr. César de Castro, afirmó que el acusado “mantuvo múltiples reuniones” con altas autoridades de los EE.UU., la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos (CIA) y la Administración de Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA), asegurando que las instituciones verificaron sus antecedentes y operaciones de manera exhaustiva.

Es decir, en un intento de desligar de responsabilidad a García Luna por supuestos controles de la CIA y la DEA, se deja notar la contundente prueba de la complicidad entre el funcionario y dichos organismos.

Pero si el dominio económico y la infiltración de drogas en nuestras naciones latinoamericanas con todas sus consecuencias no bastaba, no podemos dejar de hablar de la represión y el espionaje en nuestra región.

Ecuador, el país en el filo de la violencia

En Ecuador, el presidente Daniel Noboa propone que las fuerzas armadas intervengan en el combate del crimen organizado, “ampliando su ámbito” de ejercicio. 

Pero la cuestión central está en el efecto inverso que esto podría generar, es decir, en el uso irregular y desproporcionado de la fuerza por sobre el pueblo ecuatoriano.

“Sin duda, la seguridad pública ante contextos de violencia es una preocupación legítima y prioritaria para los Estados de la región. Sin embargo, es fundamental que las políticas de seguridad cumplan con las normas y estándares en materia de derechos humanos, particularmente ante la evidencia de los retrocesos que ocurren como consecuencia de la militarización de la seguridad pública…», decía en 2022 Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional. 

Según los especialistas Antonio Barreto Rozo y Alejandro Madrazo Lajous, en su apunte «Los costos constitucionales de la guerra contra las drogas: dos estudios de caso de las transformaciones de las comunidades políticas de las Américas«, los factores determinantes en México y Colombia para estar en la situación que están, fueron tres: “la restricción de derechos fundamentales; la militarización del poder público; [y] la aparición y consolidación de una justicia penal de excepción”.

El Brasil bolsonarista y las pistas de complicidad con el Imperio

En el gigante sudamericano, el actual director de la Policía Federal (PF) de Brasil, Andrei Rodrigues, denunció que durante el gobierno de Jair Bolsonaro se espió de manera ilegítima a 30.000 opositores. Pero la casualidad inesperada es que los datos se hallaban guardados en una nube de almacenamiento ubicada en Israel.

«Ya hicimos detenciones, registros e incautaciones y se está realizando un análisis de todo este material, incluso hemos recuperado datos de la nube. Y mira lo grave que es, estos datos de seguimiento a los ciudadanos brasileños estaban almacenados en nubes en Israel, porque la empresa responsable de esta herramienta es israelí», declaró el funcionario.

En síntesis, podemos ver con claridad que las políticas de las derechas latinoamericanas están intrínsicamente relacionadas con el imperio norteamericano. Sobre todo, las políticas ejercidas de primera mano por el mismo poder concentrado: saqueo, drogas, espionaje y la estrella de tan siniestra realidad; la represión.

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