Proyección y Nación: apuntes para el resurgimiento

Por Pablo Garello | La reunión de economistas convocada semanas atrás por Moreno resulta significativa. Como dijo Tomás Trapé en Twitter: alegra que una vez en la vida se convoque a los distintos sectores del peronismo para pensar un programa y no para un cierre de listas. Efectivamente, esto y la presentación del plan de gobierno, representan un cambio de paradigma.

Nuestro norte es el Sur

Por Juan Manuel Piccolo y Lucía Ferrari (MLN) | Los liberales instalan bases extranjeras, los keynesianos por cuestiones ideológicas reniegan de las Fuerzas Armadas y la defensa nacional. La opción de la Patria es contar con bases aeronavales propias en la isla mayor de Tierra del Fuego, para que se erija como Centro Geopolítico de la Patria.

El dilema de la hora: Nacionalismo o más de lo mismo

Por Pablo Garello | A diferencia del progresismo cultural o del economicismo técnico como variantes hegemónicas del peronismo durante los últimos años, el nacionalismo habilita lo que todo sujeto necesita para involucrarse en un proyecto colectivo: épica. ¿O ustedes pensaban que las mayorías populares se iban a enamorar del peronismo gracias a la revolución de las viejas de Cerruti o el Plan Platita de Massa?

El país de (la) Furia

Por Juan Francisco López | Hay que salir del juego anterior, ese que ya dejó de funcionar. Hay que dejar de jugar al ajedrez cuando estamos en un Counter Strike. Basta de discutir las formas, que ahí son todos aburridos.

Apuntes para la reconstrucción

Por Pablo Garello | Las bases naufragan, las internas continúan y el liderazgo capaz de aglutinar a la oposición y de canalizar hechos de enorme magnitud como la marcha universitaria, brilla por su ausencia. El peronismo no tiene discurso. Es oposición, pero no es proyecto. Es pasado, pero no es futuro.

El robo del siglo: ¿Por qué SOMISA debe volver a ser de todos los argentinos?

Por Lucía Ferrari (MLN) | Lo realista es volver a lo que funcionó, el modelo argentino para el proyecto nacional que Perón nos dejó a nosotros, su único heredero, el pueblo. Por eso las plantas de San Nicolás y Zapla deben ser expropiadas y devueltas a quien las construyó con sangre, sudor y lágrimas: el Estado Empresario argentino.